¿Cómo es la Ceremonia del Peyote o Hikuri?

 La Ceremonia del Peyote, también conocida como Hikuri en la tradición huichol. Los huicholes son un grupo indígena de México que practica esta ceremonia como parte de sus tradiciones espirituales y culturales. 


Fotografía de un participante en la ceremonia del peyote.
Fotografía de un wixárika en la ceremonia del peyote.


En este sagrado espacio ceremonial, somos uno con el universo, trenzando nuestras historias con los hilos de la eternidad. Aquí, en el santuario del peyote, abrimos nuestras alas de colores vibrantes, volando hacia los reinos invisibles, hacia los horizontes del alma donde resuenan los cantos de nuestros antepasados.


Que la llama del fuego sagrado Tatewari ilumine nuestros corazones y que el humo del copal purifique nuestros caminos. En esta noche de misterio y magia, somos navegantes en el río del tiempo, navegando hacia la fuente de la vida, hacia el néctar de la eternidad.


Ceremonia del Peyote


Preparación espiritual y física:


Antes de la ceremonia, los participantes se preparan espiritualmente a través de la meditación y la purificación. 

Tesde semanas antes se abstienen de ciertos alimentos, sobre todo de carnes rojas como respeto a la vida, y tambien se dejan actividades que desgasten la energía vital como el sexo.


Búsqueda del peyote:


Por la mañana los participantes, liderados por un mara'akame (chamán huichol), se embarcan en una búsqueda ritual del peyote en el desierto. El peyote es una planta sagrada que contiene alcaloides psicoactivos y se considera una puerta de acceso al mundo espiritual.

Lo que cuenta la tradición huichol es que las personas no encuentran al peyote, el peyote los encuentra a ellos, como un maestro que busca a su alumno para regalarle su conocimiento.

Todos los peyotes que son encontrados por el participante deben de ser ingeridos, ya sea en esa ceremonia o a lo largo de su vida, ya que cada uno representa una enseñanza que debe de atravesar.


Recolección del peyote:


Una vez que se encuentra el peyote, se realiza una ceremonia de agradecimiento a la Madre Tierra antes de recolectar las plantas. Esta acción se lleva a cabo con gran respeto y reverencia hacia la naturaleza.

Como una forma de conservación del cactus, solo se corta con una navaja o cuchillo para evitar sacar de raíz y así dar la oportunidad para que vuelva a crecer.

Recordemos que cada peyote tarda en florecer 20 años.


Ritual de apertura:


Antes de consumir el peyote, se lleva a cabo un ritual de apertura, que puede incluir cánticos, danzas y ofrendas. Este ritual sirve para invocar a los espíritus protectores y establecer una conexión con el mundo espiritual.

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Consumo del peyote:


Una vez que se ha abierto el espacio ritual, los participantes consumen el peyote, ya sea masticándolo directamente o preparando una infusión con él. El peyote se considera un medio para alcanzar estados alterados de conciencia y para recibir visiones y revelaciones espirituales.


Experiencia visionaria y curativa:


Durante la ceremonia, los participantes pueden experimentar visiones y sensaciones intensas, así como una profunda conexión con la naturaleza y el mundo espiritual. Se cree que el peyote tiene propiedades curativas que pueden sanar el cuerpo, la mente y el espíritu.


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Cierre y agradecimiento:


Una vez que la experiencia con el peyote ha concluido, se lleva a cabo un ritual de cierre para dar gracias a los espíritus y despedirse de ellos. Los participantes expresan su gratitud hacia el peyote y la Madre Tierra por las enseñanzas recibidas durante la ceremonia.


Integración:


Después de la ceremonia, los participantes pasan por un proceso de integración, reflexionando sobre sus experiencias y cómo pueden aplicar las enseñanzas recibidas en su vida diaria. También se les anima a compartir sus experiencias con la comunidad para enriquecer el conocimiento colectivo.


Es importante señalar que la Ceremonia del Peyote es un ritual sagrado y debe ser tratado con el máximo respeto y cuidado. Los huicholes consideran que el peyote es un regalo de los dioses y una herramienta para la sanación espiritual, por lo que su uso se rige por estrictas normas y tradiciones.






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